De mis mañanas.

Una va por la vida viviendo sus días lo mejor que puede. Y es que a veces, no queda de otra que refunfuñar en las mañanas y levantarse a iniciar el que podría ser un gran día, o no.

Me ha costado trabajo entender de qué van estos subidones y bajones de ánimo. Me ha costado aprender a identificar cuando será un día bueno o uno no tan bueno para mí. Aún estoy trabajando en saber como hacer que sean más buenos que malos. Aún refunfuño en las mañanas.

Hoy fue uno de "esos días". Me desperté desde temprano, pero no había manera de abrir los ojos y mover el cuerpo de la cama. Solamente estaba ahí, contemplando el techo y viendo como cambiaba la luz de mi habitación según avanzaba la mañana.

Escuchar el piano de Paola en la recámara de junto, fue motivo suficiente esta vez para poner todo mi esfuerzo en levantarme de allí. Corrí a escucharla pegada en la puerta para no distraerla. Pao tiene 8 años y es uno de mis más grandes motores. Inicié mi día.

A veces aún no entiendo como es que habemos personas que quizá nuestro mayor logro del día sea ese, iniciarlo. Todavía me enojo conmigo por no poder simplemente levantarme y llevar un día normal como todos. Aún no acepto que no es momento de muchas cosas para mí.

Fui al comedor y vi a mi mamá ahí esperando para desayunar conmigo, para tomarnos un café y preparar la comida juntas. Vi a Paola jugar a que es un gato, arrastrándose por toda la casa y haciendo "prrr" cuando se me acerca, me morí de risa. Ayudé a mi papá a descargar una app, me sentí útil. Salí a caminar con Jobs.

Mi día va mucho mejor de lo que podría haber esperado en la mañana. Pude sentarme a escribir esto. Agradecí por haber tenido fuerza hoy. Agradezco por mis amigas que siempre están allí pendientes, haciéndome reír, preguntando como estoy. Agradezco por esas personas que sin imaginarme han tomado un lugar especial en mi vida. Agradecí por los "Buenos días" esos que pude responder 2 hrs después de recibirlos, porque fue hasta entonces que me pintaron buenos.

Y así voy aprendiendo poco a poco, que así es como es. Esperando que en algún punto sean más los días buenos, que sean más los días como hoy que pude reponerme. Que no me quedé allí. Que pueda decir: "Buenos días" con la certeza de sentir desde mi corazón que será un gran día.

Gracias por llegar aquí, por permitirme compartir.