#Storytime: La Vie en Rose, cree en tus proyectos.

¡Hola hola! Gracias por leerme un día más en mi entrada semanal! No saben lo feliz que me hace contar con ustedes y ver que poquito a poquito somos más.

Hoy quiero contarles acerca de los sueños, de los proyectos, las ideas y las metas. De cómo podemos las personas ser autosuficientes y emprendedoras. Los que me conocen saben que siempre he sido una mujer de proyectos. Siempre me ha gustado emprender y hacer cosas por mis propios medios. Y eso no quiere decir que no haya trabajado alguna vez, o que no me haya tocado ser Godín. He sido Godín y una muy feliz en diferentes etapas de mi vida. Pero mi mente que siempre está inventando algo nuevo, no me permite ser solamente eso. Así que regularmente, estoy pensando en algo qué hacer, algo qué vender, algo qué crear. Y si ustedes son así les recomiendo quedarse y leer este post.

Siempre me ha gustado tener mi propio ingreso y literal desde niña me gusta vender y hacer cosas para ganarme mi propio dinero. Recuerdo mucho que con mi amiga de la infancia, hacía en mi cochera un bazar de juguetes en vacaciones, vendía todo lo que ya no juagaba y luego con eso, íbamos a rentar películas, o comprar Barbies nuevas.

Cuando estaba por salir de la uni, mi mejor amiga y yo iniciamos nuestro "propio negocio" y empezamos a montar fiestas de baby shower, despedida de soltera y cumpleaños. Así nos ganábamos una lanita propia y podíamos irnos se shopping, empezar a endeudarnos como "adultas" y darnos nuestros gustitos. Luego salimos de la escuela, y cada una se metió a trabajar de Godín, y cambiamos las fiestas por el montaje de mesas de dulces y seguíamos trabajando entre semana en nuestras oficinas. De repente después de una Boda a la que servimos una mesa de postrecitos (hechos por nosotras), nos empezaron a llamar por que dejábamos nuestras tarjetas y resulta que los cupcakes en especial les habían encantado a todo mundo. Y así fue como inició nuestro proyecto.

Cuando me di cuenta, tenía entregas casi diario y mi oficina, (en ese entonces trabajaba como jefa de mkt en un centro comercial) estaba llena de cajitas de cupcakes para entregar, ¡todos los días!. Y poco a poco fue tomando forma. Poco a poco me di cuenta que no estaba 100% feliz en mi trabajo, y sobre todo lo que más me bajoneaba era que en ocasiones, no había naaaada qué hacer, y yo por dentro me moría por llevar a cabo mis ideas y mis proyectos y en lugar de eso, tenía que pasar 8 hrs postrada en una oficina dónde no explotaba mi capacidad.

En marzo de 2012 renuncié a mi trabajo Godín y me aventuré con mi amiga a buscar un local, remodelarlo e iniciar nuestro propio negocio. La Vie en Rose.

Yo estaba feliz, encontramos un local pequeñito perfecto para nuestras entregas y lo dejamos hermoso y con nuestro sello único. Estaba en mi avenida favorita de la ciudad, todas las mañanas podía irme caminando con mi canasta de cupcakes al negocio, y llegaba y todo olía a vainilla.

A la par continuaba con un proyecto que aún no tenía nombre pero que ya me había dado algunos clientes, y hoy se llama "La Diseñería". Yo estudié Publicidad y me he enfocado en la onda de diseño gráfico desde entonces. Y pues complementaba un proyecto con otro todo el tiempo, (aún lo hago). Así, tengo a mis clientes, trabajo en mis propios horarios y hago lo que me gusta. Y sin duda eso me encanta.

Por ahí de 2014 la situación en la economía de mi estado y de mi ciudad se vino para abajo por un desfalco político, crisis y demás y tuve que quitar la tienda de cupcakes. En ese momento, sentí que tooooodo se me desmoronaba, que mi sueño se venía para abajo y estuve súper deprimida un tiempo porque sentía que todo mi esfuerzo se había desvanecido. Entonces me di cuenta: mis amigos, mi familia y mis clientes más leales, ¡seguían ahí! Mi tienda no era ese local, si no todo mi concepto, mi idea, mi prestigio y sobre todo: MIS CLIENTES. Así que me puse las pilas, tomé fuerzas y empecé de nuevo con mi tienda en línea! Gracias a Dios que nací en la era de la tecnología y que todo esto de las ventas por Internet se me da bien, Mi proyecto sigue y seguirá mientras yo así lo decrete.

No quiero hacerles el cuento más largo, solamente quiero que sepan que sin importar lo que parezca en este momento, sin importar qué tan inseguros se sientan deben creer en ustedes, que si tienen un proyecto o si quieren emprender lo intenten, que por intentar nada se pierde, ¡y ganas mucho!.

Que si estás en un trabajo que no te gusta, que no te llena, y tienes un sueño, si tienes un proyecto, una idea, ¡realízala!, trabaja en eso que quieres. Toma la iniciativa, no tengas miedo, que más cosas buenas pueden pasarte si lo intentas que si te quedas con las ganas. Cree en tu idea, cree en tu talento. Que si te gusta cantar: ¡canta! y vuélvete el mejor en eso.

No le des largas, empieza con lo que tienes, y haz cosas increíbles con eso. ¡Seguro puedes!

Intenta y falla, y vuelve a intentar. Y si fallas otra vez, se más enfocado y hazlo de nuevo. Hazlo hasta que lo logres. No desistas.

¡Cree en ti!